Lunes uno. En la Comisión plural de IU el tiempo corre. Allí participé en sustitución de JJ Nuet. Cayo Lara, que coordina esa comisión de las cinco listas, plantea que se necesitará un reloj de arena para que las intervenciones sean en el tiempo exacto. Cayo se ve coordinador de IU para el próximo 14 D, en el Consejo Político Federal (CPF). La cuenta atrás va lenta e inexorable. Algunos le recuerdan que incluso si es ungido coordinador lo será en minoría, con margen escueto de maniobra. La calma es una apariencia de normalidad.
El ambiente es correcto y tenso, como conviene a este compás de espera antes de la tempestad, para la que sólo faltan unas pocas cartas. ¿Habrá algún as aún?
Se acuerda una nota de prensa sobre las ayudas gubernamentales a las empresas automovilísticas, con las condiciones de asegurar los puestos de trabajo, y ver como puede intervenir la plantilla a través de los sindicatos. Otra nota sobre el día del sida. La movilización… ¡para la nueva dirección!
Se acuerdan los cupos de cada federación y el de EUiA para completar el CPF.
Circula una resolución sobre la crisis económica, “Hay alternativa”, que al parecer era para la asamblea federal y quedó pendiente.
Se ve que hay que hacer el orden del día para el CPF convocado, pero hay diversas interpretaciones sobre el mandato de la asamblea. Elegir la coordinación, escoger o no la dirección política –Presidencia y Permanente-, unos dicen que los criterios ya están establecidos, otros no lo tienen tan claro. La movilización y el proceso de refundación parece que también está en fase de interpretación. Las europeas se citan como prioritarias.
Vamos que el 14 D hay que decidirse por un coordinador u otro, de una vez.
La pluralidad que aparece ahora queda circunscrita a las cinco candidaturas. Tendremos que ver si en la nueva dirección de la refundación se incorpora a la corriente Redes, al menos para no hacer un paso atrás respecto a la Comisión unitaria anterior.
La arena imaginaria hace pasar el tiempo. Tiempo para seguir la cansina negociación para un consenso que no se vislumbra. Los documentos adoptados en la asamblea hacen que IU, como barco sin viento ni combustible, gire en torno al remolino de su crisis que amenaza con engullirla.
Francesc MS
miércoles, 3 de diciembre de 2008
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