Congreso sindical en Serbia

En los días 18 y 19 de septiembre se celebró en Novi Sad el Congreso de la federación del metal de Nezavisnost con una numerosa asistencia y participación de delegados del país (más de ciento cincuenta delegados efectivos) y también una numerosa delegación extranjera. De éstos últimos estaban presentes el Secretario general de la FEM, la responsable del IMF por los Balcanes, y representantes de los sindicado del metal de Bélgica-CCMB, Se Co-Industria de Dinamarca, Metal de Finlandia, METALICY y PODKREPA de Bulgaria,POEM de Grecia, CGT y CFDT de Francia, OS KOVO de Chequia, OZ KOVO de Eslovaquia, FNS Solidaritatea de Rumania, SIER de Macedonia, SMH de Croacia, SMBiH de Bosnia, SMIR de República Srpska, MMWU de Rúsia, GMTN de Austria, FIM-CISL de Italia y yo mismo en representación de la federación del Metal de las CCOO de España y de la secretaría de cooperación de las CCOO de Cataluña.
La situación del país es complicada. La economía arranca poco a poco, si bien aparentemente se ve una situación mejor que hace unos pocos años atrás. Esta mejor situación relativa es reconocida en general por los sindicalistas y ha sido como consecuencia de un alza de los salarios. Pero al mismo tiempo hay una constatación generalizada de que los empresarios hacen prácticamente lo que quieren, sin respetar muchas veces los convenios y acuerdos generales que se firman, sin querer establecer ningún tipo de diálogo con los sindicatos. Y sin que el gobierno (ni el anterior ni el actual) se atreva a decir nada al respecto.
La situación económica tras las privatizaciones, que todavía están en proceso, lleva a que algunos sectores del metal trabajen más o menos normalmente (siderurgia, línea blanca...) y otros estén estancados. La precariedad laboral se está instalando y hubo referencias a esta situación sobre todo en relación a los jóvenes y en los nuevos contratos. También el papel de las mujeres es más difícil, sobre teniendo en cuenta que muchas de ellas ocupaban hace unos años cargos de responsabilidad o técnicos y ahora les es más difícil obtener trabajo que a los hombres.
La situación política es muy complicada. Con unas elecciones recientes que han mostrado la casi igualdad de fuerzas entre sectores neoliberales europeístas y sectores de la derecha nacionalista de Kostunica y del profascista Partido Radical, la opción del sindicato ha sido mostrar los peligros de que ganara este último sector. La derecha más reaccionaria ha utilizado la independencia de Kosovo para hacer una agitación contra la integración europea y contra el gobierno y Partido Democrático de Todic.
La detención del genocida Radovan Karadzic este verano, con la colaboración del gobierno serbio y el cambio de alianzas del Partido Socialista de Milosevic que ha pasado de apoyar al Partido Radical a formar parte del nuevo gobierno junto con el Partido Democrático, han abierto una crisis dentro de los radicales. Todo el mundo que pregunté manifestó que se producen estos cambios por puro interés, para estar en el gobierno. No obstante parece que esta nueva situación política da un cierto respiro en el sentido de evitar un gobierno nacionalista serbio radical y anti UE, que es la opción que el sindicato también quiere evitar. Este respiro no evita que consideren que el gobierno no tiene en cuenta los sindicatos, que no hace nada para promover un verdadero diálogo social ni presiona a los patronos a la concertación, ni tampoco que hace nada para tener un plan industrial.
Esta situación económica, política y social de Serbia, similar a otros países, presiona sobre las cabezas de la mayoría de dirigentes sindicales. De todas las ramas sindicales de Serbia seguramente la mejor organizada es la del metal. Fue el principal impulsor de la lucha por la independencia sindical bajo Milosevic, impulsor de la Confederación de Nezavisnost, la que tiene un equipo de cuadros cohesionado y probado en las luchas y la que tiene también una experiencia y amplia relación internacional con federaciones y países.
En el IV y el V Congreso del Metal, hará entre cuatro y cinco años, ya se decidió impulsar un sindicato que agrupara toda la industria. Se contaba con la fusión con el textil, calzado y química. Incluso se preveía que se podría añadir la construcción. Pero los dirigentes metalúrgicos dicen que esta fusión fue obstaculizada por la Confederación. A partir de aquí empezó una cierta lucha por el poder y desafíos mutuos. Algunos viejos dirigentes del sindicato, como el antiguo presidente del sindicato del Metal e histórico del sindicalismo en Serbia (era un dirigente de los antiguos sindicatos y condujo una huelga general intentando la reforma del sindicato, cosa que no consiguió y promovió entonces el sindicalismo independiente. Nezavisnost= Independencia), consideran que hubo errores por las dos partes, aunque empezó el presidente de la confederación, Canac. En cualquier caso tanto Nikolic, como otros viejos dirigentes del metal, hoy dan básicamente la razón a la federación del Metal en su enfrentamiento con la confederación y reconocen a la dirección que ha gobernado el sindicato del metal y que ha sido de nuevo confirmada en este congreso. Una dirección que es más joven que la de la confederación, como su presidente Dragan Matic y su secretario Aleksandar Todic, que ha realizado luchas con empuje, algunas de ellas exitosas, y tiene el reconocimiento general de la base.
El Congreso ha sancionado una situación que dura meses. Después de graves acusaciones mutuas y, sobre todo, de expulsiones, de utilización del poder para tratar de destruir una dirección con la que no está de acuerdo, el congreso ha querido pasar página. Ha sido una situación muy dura, más dura incluso que la etapa inicial de los tiempos de Milosevic. Entonces el enemigo estaba claro y se luchaba de frente, en cambio ahora dicen todos los dirigentes metalúrgicos que se han utilizado métodos antidemocráticos, dictatoriales, burocráticos, para evitar un debate y confrontación de líneas sindicales. En la medida en que el sindicato del Metal quiso impulsar una federación de industria y generalizar una lucha por una Plan industrial en el país, eso fue considerado por Canac un ataque y un "moverle la silla". Y cada petición de que Canac explicara el contenido de las reuniones en las que participaba, de que diera informes, era rechazado de forma despótica.
El Congreso ha pasado página y ha ratificado la misma dirección. Al mismo tiempo todo el mundo es consciente de que la situación de enfrentamiento entre la federación del Metal y la Confederación todavía continuará. Por lo que hace las delegaciones de los Balcanes, los dirigentes de los sindicatos de Bosnia, Macedonia, Croacia o Bulgaria se manifestaron en todo momento solidarios con el sindicato del Metal de Nezavisnost. Algunos de ellos han pasado por situaciones muy similar, como los compañeros de la República Srpska. Y, como decía el dirigente de los astilleros de Croacia "es que ser sindicalista en los Balcanes es muy complicado". En cualquier caso todo el mundo estaba muy contento de la amplía delegación internacional presente en este congreso.

Alfons Bech
23 de septiembre 2008